El primer acto de saqueo tuvo lugar en las primeras horas de la madrugada, el supermercado Schneider, situado en la intersección de las calles Brown y Paraná, fue objeto de un violento asalto. Bandidos sin escrúpulos, irrumpieron en el establecimiento y llevaron a cabo un robo que dejó al descubierto la tematica que se esta repitiendo en distintos puntos del pais.
Aproximadamente una veintena de individuos, todos portando capuchas y gorras, perpetraron su entrada violentamente. Utilizando piedras como su herramienta de elección, destrozaron los cristales del frente en una ráfaga de acción sorprendentemente cronometrada. En tan solo 35 segundos, mientras la alarma resonaba en una señal de alerta, estos delincuentes consumaron su delito. Se apoderaron de valiosa mercadería, la caja registradora y una cantidad significativa de bebidas alcohólicas, antes de emprender su huida a pie en dirección a las vías del ferrocarril.
La respuesta no se hizo esperar. El personal policial, alertado a través del número de emergencia 911, actuó con celeridad. Con el objetivo de preservar la seguridad de la zona y la tranquilidad de los ciudadanos, se estableció una custodia permanente en las cercanías del supermercado afectado.
Anselmo Schneider, una figura arraigada en el comercio local con tres décadas de dedicación, compartió su sentir en medio de la consternación. “Siento una gran impotencia”, expresó con pesar. Aunque las estanterías de alimentos se mantienen intactas, el comerciante lamentó la pérdida de una valiosa cantidad de bebidas alcohólicas, siendo este el blanco principal de los delincuentes.
Las autoridades no han permanecido pasivas ante este incidente. Las cámaras de seguridad del establecimiento están siendo minuciosamente analizadas en búsqueda de pistas que conduzcan a la identificación y captura de los responsables. En aras de reforzar la seguridad y restablecer la confianza en la comunidad, se está considerando la implementación de medidas adicionales para prevenir futuros actos de saqueos y mantener un entorno seguro para todos. La comunidad local se encuentra en alerta máxima, consciente de la importancia de colaborar con las fuerzas del orden para resguardar la tranquilidad y la integridad de la zona.
