El conflicto en Ternium se profundiza luego de que el personal tercerizado, acompañado por la Unión Obrera Metalúrgica (UOM), decidiera sostener el paro total de actividades a pesar de la conciliación obligatoria dictada por el Ministerio de Trabajo.
La medida, que busca presionar por una recomposición salarial, se mantiene bajo el liderazgo del secretario general de la UOM San Nicolás, Naldo Brunelli. “Se agotaron todas las instancias. Nuestros compañeros no pueden esperar más, muchos ya no tienen ni para mandar a sus hijos a la escuela”, expresó el dirigente en una conferencia que reunió a centenares de trabajadores.
Desde el sector empresarial pidieron que las negociaciones se desarrollen sin condicionamientos, pero el gremio ratificó que no dará marcha atrás mientras no se atiendan los reclamos de los tercerizados. Brunelli sostuvo que es momento de “tomar decisiones firmes” y advirtió que la protesta continuará “contra todo riesgo”.
La continuidad del paro genera un clima de incertidumbre en la planta y en toda la cadena productiva, donde ya se sienten los efectos de la paralización. Pese a los intentos oficiales por encauzar la discusión, la falta de acuerdo mantiene la tensión en aumento.
Por ahora, el escenario se muestra trabado: el gremio endurece su postura y la empresa insiste en que el diálogo debe darse sin medidas de fuerza. La expectativa está puesta en los próximos días, cuando podría definirse si hay avances o si el conflicto escala aún más.