
El pasado domingo, un hecho de extrema violencia conmocionó a la comunidad de José Ingenieros, cuando Somoza disparó contra su propia madre y un amigo, para luego intentar quitarse la vida. Según trascendió, el estado de salud del agresor es crítico y los médicos estiman que perdió más del 60% de la masa encefálica a raíz del disparo que se efectuó.
Fuentes médicas señalaron que solo un milagro podría salvarlo, ya que gran parte de su masa encefálica se encuentra comprometida. En caso de sobrevivir, podría quedar con secuelas irreversibles, además de enfrentar un futuro proceso judicial por el ataque cometido. A raíz del testimonio de Nazareno Alberto Sigali, el único implicado que logró salir del peligro tras recibir también un disparo de Somoza, la investigación cuenta con un relato clave para reconstruir los hechos.
Por otra parte, la madre de Somoza también continúa en estado crítico, con sus órganos vitales seriamente comprometidos debido a los múltiples disparos que recibió por parte de su propio hijo.
El violento episodio ocurrió en la tarde del domingo en una vivienda de José Ingenieros al 749, cuando el agresor abrió fuego en medio de una comida familiar. La investigación judicial avanza mientras los médicos trabajan contra reloj para salvar a las víctimas.