Las fuertes lluvias que azotan a San Nicolás han transformado el paisaje urbano de la ciudad, y el skatepark no ha sido la excepción. El skatepark ha quedado completamente anegado, convirtiéndose en una gran piscina improvisada.
Los residentes cercanos al skatepark han aprovechado esta situación inusual para darle un uso diferente al lugar, utilizando el agua acumulada para refrescarse y disfrutar de un momento de esparcimiento. Niños y adultos han sido vistos nadando y jugando en el agua, aprovechando la nueva “pileta” que ha surgido en medio de la ciudad.
Las autoridades locales han recomendado precaución y han recordado a los vecinos que, aunque la situación pueda parecer divertida, es importante mantener la seguridad y evitar situaciones de riesgo. Además, se espera que una vez que las lluvias cesen, el skatepark vuelva a su función original, una vez que el agua sea drenada y se realicen las reparaciones necesarias.